El zinc es uno de los minerales que el organismo necesita para llevar a cabo muchas funciones. Este se encuentra en las células de todo el cuerpo, participa en la en el crecimiento y división celular, necesario para el sistema inmunológico, participa en el proceso de cicatrización, importante para que los sentidos de olfato y gusto funcionen correctamente. También es necesario para el periodo de embarazo, lactancia, desarrollo y crecimiento de los niños.
AL tener una deficiencia en zinc se van haciendo presentes varios síntomas y se puede llegar a tener serios problemas de salud, como, por ejemplo:
– Perdida del cabello
– Perdida del apetito
– Depresión
– Pérdida del sentido del gusto y/o de olfato
– Diarrea
– Problemas de memoria
– Infertilidad
– Dermatitis
– Infecciones frecuentes
Una deficiencia en Zinc se diagnostica por medio de un examen de sangre, a ser así, puede ser que el medico deje un suplemento tomado de zinc por un tiempo, para lograr salir de la crisis lo antes posible. Es importante tomar en cuenta que debe recetado por el médico tratante con la dosis adecuada que la persona requiere; ya que si se consume en exceso también pueden presentarse síntomas como diarrea y cólicos abdominales, y provocar una deficiencia otros minerales como cobre y
hierro.
Una deficiencia en zinc se puede dar a cualquier edad, sin embargo, es común que los adultos mayores padezcan de una deficiencia en zinc, debido a que su con sumo en proteínas de origen animal va disminuyendo, y así mismo también disminuye la capacidad de absorción de dicho mineral.
La cantidad de zinc que una persona necesita varía dependiendo la edad. es decir, la cantidad varía para bebes, niños, adolescente, adultos y adultos mayores.
normalmente
Es importante llevar una dieta balanceada y nutritiva incluyendo proteínas de origen animal, ya que estas aportan en altas cantidades el zinc, en menor cantidad lo aportan los frutos secos y las legumbres.