La indigestión es un síntoma común en las personas, pero no es bueno sentirse indigestado todo el tiempo ya que se pueden desencadenar muchos problemas de salud.
La indigestión se presenta con síntomas como reflujo, acidez, gases, estreñimiento, diarrea, cansancio justo después de comer. Esto puede darse por una comida muy grasosa, comer mucho, comer muy rápido, comer de pie, manejo de niveles altos de estrés, sedentarismo, entre otros.
Una buena digestión es importante para la salud general del organismo, al sentirse indigestado muy seguido es probable que se tengan deficiencias nutricionales. Cuando una persona tiene indigestión se está evitando que la
descomposición de alimentos sea la adecuada y este proceso es importante que se de, para que las vitaminas, minerales, proteínas, carbohidratos y grasas sean absorbidos en el intestino y luego distribuidos en todo el organismo para que este pueda funcionar eficientemente.
¿Qué hacer para mejorar para aliviar la indigestión?
Si se está teniendo problemas de indigestión, se recomienda llevar una dieta más liviana, evitando alimentos altamente procesados, embutidos, carnes rojas, frituras, comida rápida, entre otros. La idea es hacer fácil el trabajo de la digestión para que se pueda ir regulando. Es recomendables llevar una dieta alta en fibra,
verduras y frutas para favorecer la motilidad intestinal. También es importante integrar a la alimentación proteínas más livianas, como lácteos desgrasados, pollo sin piel y pescado. El consumo adecuado de agua favorece todos los procesos del organismo incluyendo la digestión. Un té digestivo después de las comidas puede ayudar a aliviar y a evitar la indigestión junto a una dieta más liviana como la mencionada anteriormente; por ejemplo, te de manzanilla, pericón, menta y
hierbabuena.
Se recomienda visitar un gastroenterólogo para chequeo y hacer varios exámenes
y descartar que existan otros problemas intestinales y gástricos, ya que en algunos casos es necesario acompañar la dieta, de ciertos medicamentos para ayudar a mejorar.
Por Guisela de Gramajo
Chef especializada en nutrición
